El yoga después del embarazo es igual de bueno que durante el embarazo.
¿Volver a tu forma habitual no es tan rápido como te gustaría? Entiende que ahora tu cuerpo es una fuente de alimentación, un medio de transporte, un columpio y un lugar de calor y confort. Muchos de los cambios durante el embarazo, no son nada comparados con la vida al lado de un nuevo bebé. Falta de sueño, ganas de hacer pis casi incontrolables y mucho acunar con los brazos acaban dejándote agotada, pero sabes mejor que nadie que vale la pena solo son verles sonreír.
Es fácil que te duela la espalda porque todavía no has recuperado el control de tu centro de gravedad, los brazos como si hubieras hecho flexiones durante días y los pies de pasear por las noches para intentar calmar a tu bebé.
Lo más importante es que sepas decir ¡Este es mi nuevo cuerpo! Y que estés tranquila porque si es bueno para tu bebé también es bueno para ti.
Relajación, control de la respiración y fuerza interior. El yoga después del embarazo te da combinación perfecta para soportar esta nueva y frenética etapa de tu vida.Hay algunas posturas que puedes hacer casi en cualquier momento, muy recomendables para hacerlas en casa cuando tu bebé esté en su colchón de cuna. También puedes intentar hacerlas con él, tiene muchos beneficios para los dos.
Variante en la pared. Coloca las manos en la pared a la altura de la cintura, apoya totalmente las palmas y coloca los dedos medios hacia arriba. Esta postura abre la espalda y las caderas, y es fácil apoyarse en las muñecas. Cualquier espacio abierto donde puedas apoyarte te servirá y además no tienes que tumbarte.
Variante de pie. Cruza un tobillo sobre la rodilla opuesta. Abre la rodilla que queda abierta a un lado y trata de hacer el efecto de sentarte manteniendo la columna recta. Inclina el torso hasta que notes cómo se estira la cadera y la pierna que tienes doblada y abre los brazos. Mantenlo durante 5-10 respiraciones si estás de pie y durante 1-2 minutos si estás sentada.
La lactancia y llevar a tu bebé en brazos pueden dejarte encorvada y dolorida sin un centro de gravedad fuerte para mantenerte. Solo tienes que plegar una esterilla de yoga y ponerla debajo de ti. Pero que no pase de los hombros. Los hombros tienen que trabajar hacia el suelo.
Vuelve a conocerte y ama las nuevas capacidades y la fuerza de tu “nueva” tú, en tu «nuevo» cuerpo. Al fin y al cabo si ha sido capaz de traer una nueva vida, es capaz de hacer muchas cosas buenas.
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1 comentario
[…] Y una vez nazca tu bebé es muy recomendable seguir con el yoga. Aprovecha cuando tu bebé duerma sobre su colchón de cuna para seguir poniendo en forma tanto mente como cuerpo. Las tres posturas más recomendadas para después del embarazo son estas. […]