Llevar al bebé en un portabebés no es solo una tendencia, también lo recomiendan los expertos médicos.
Cuando pensamos en llevar al bebé en un saquito, seguramente pensemos en las mamás de moda en Instagram, mostrando bellas imágenes de todas las aventuras que realizan con su bebé perfecto.
Pero la verdad es que el uso de sacos para dormir al bebé no es solo una tendencia, en realidad lo recomienda la Academia de Pediatría.
Se recomienda no sólo como una respuesta al llanto, sino que es recomendable para evitar el llanto y promover la unión entre padres y el pequeño, así como favorecer el desarrollo del bebé.
Existen diferentes estilos y parece ser difícil elegir, pero siempre puedes consultar con otras mamás para saber cuál ha sido su experiencia e intuir cual será el mejor para tu bebé.
La marca de complementos para tu bebé Elodie Details, es la más popular entre las mamás de moda, ellas dan su opinión y te puede ayudar a elegir.
Tal y como decíamos, los sacos dormir bebé son útiles cuando tu bebé es un recién nacido o muy pequeño porque es liviano y ayuda a mantener al bebé acurrucado junto a tu cuerpo.
Son muy populares los comentarios sobre que los bebés que usan portabebés están siendo «malcriados». ¿Pero adivinas qué? ¡A los bebés les gusta ser llevados! Y la Academia de Pediatría también está de acuerdo.
Dicen que no es posible malcriar a un bebé sosteniéndolo demasiado y que, de hecho, el uso de los portabebés puede reducir el llanto, lo que conlleva menos estrés para todos .
Cuando el bebé es recién nacido debe ir sentado sobre sus nalgas, pero no con las piernas colgando. Sus piernas deben formar una M, como una ranita, con las piernas abiertas aproximadamente 45º con respecto al eje corporal y las rodillas ligeramente más altas que el culete.
Esta postura es ideal para ayudar a solucionar casos de displasia de cadera leves.
La espalda debe formar una C (cifosis de la columna), con la columna vertebral curvada, lo más parecido posible a la postura que tenía dentro del útero materno. El cuerpo del bebé debe quedar pegado al cuerpo del portador.
El niño tiene que quedar lo suficientemente alto como para que lleguemos a darle un beso prácticamente sin agacharnos. Si queda demasiado bajo, el peso no se reparte de forma adecuada cargando demasiado las lumbares del portador.
Algunos bebés y algunos padres encontrarán que el uso de un portabebés simplemente no funciona con ellos y eso también es aceptable.
Lo que hay que tener en cuenta en un portabebés es que se respete la postura natural del bebé según su etapa de desarrollo (que no adopte una postura forzada), que sea apropiado para su peso y tamaño, que resulte cómodo para el portador y tener claro el uso que le vamos a dar.
Mientras esto suceda, ya es decisión tuya elegir un portabebés o no.
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